Rumbo a la economía y política que funcione para todos

La economía no funciona. El hombre cada vez tiene más necesidades gracias al mercado, pero el mercado funciona para unos pocos en un mundo dominado por grandes corporaciones y banqueros. La democracia liberal en occidente es una farsa y algunos añoramos tiempos que no conocimos, como el Estado del Bienestar surgido hace algunos decenios. La economía debe cambiarse para que funcione. Ni el liberalismo ni el socialismo (fascista o comunista) son la solución. Necesitamos DEMOCRACIA de verdad.

MOTIVO DEL BLOG

Bienvenidos al blog donde se intenta hablar fundamentalmente de economía y política. He percibido que ni el comunismo o socialismo marxista ni el neoliberalismo, funcionan. Es necesario crear un consenso político - económico que signifique que la economía de los países sea buena para todo el mundo, no solo para los plutócratas ni para políticos demagogos.

El motivo es descubrir el espíritu crítico y científico de la economía, donde, según he podido entender y asimilar, no existe Escuela económica que prevalezca sobre ninguna otra pues todas adolecen de fallos; más bien existen sectas económicas al igual que en la política están los partidos políticos que son entes destinados a confrontarnos pero no a resolver los problemas prácticos de las empresas ni de los ciudadanos. Creo que la única teoría válida para que la economía de una comunidad vaya por el buen rumbo debe contener los siguientes ingredientes: actores económicos con ética, gestores públicos que se adecuen a valores democráticos de verdad, y usar el capitalismo social para satisfacer al máximo número de personas, con la prioridad de dotar de libertad económica a los ciudadanos pero siempre con el sustento del Estado que deberá estar vigilante mediante Ley sobre el comportamiento de los agentes económicos, sobre todo de los que tienen más influjo.

La economía de las naciones más poderosas se fortalecieron con el proteccionismo (Gran Bretaña entre 1712 y 1846) y EEUU desde que se independizó de Gran Bretaña, pero desde 1973 aparecieron los neoliberales para abrir fronteras a los países y deslocalizar producción hacia países que no usan las herramientas democráticas (libertad de prensa, libertad de expresión, libertad de movimientos, democracia) y practican un fuerte proteccionismo y una violación sistemática a los principios del mercado, un neomercantilismo expresión de un Absolutismo Imperialista porque en el siglo XVII con el Antiguo Régimen. El capitalismo financiero está engullendo el capitalismo de la empresa productiva (Marx predijo el final del capitalismo por este motivo), y eso es algo que debemos frenar. Para ello debemos ser reflexivos y críticos con el actual neoliberalismo que interviene para el interés de la plutocracia, sin dejarnos arrastrar por la cerrazón contumaz del socialismo-comunista o socialismo-fascista y mucho menos seguir las ideas de los anarquistas de mercados pues son los más peligrosos. La orientación de las políticas económicas con el intervencionismo es hacia el control de la inflación pero los Estados en occidente no aplican los aranceles adecuados para frenar el auge del fascismo estatal concentrado en el poder de países fuera de los marcos de democracia y del estado del bienestar. Sin embargo, durante el Estado del Bienestar, el Estado se orientó hacia políticas de pleno empleo y los ricos pagaban impuestos adecuados, mientras que ahora lo pagan las clases medias y bajas, pues aquellos se burlan del Estado y de la Ley, pues controlan tácitamente las decisiones políticas desde sus posiciones de poder en los Estados.

El Estado debe funcionar como una empresa, a los funcionarios de carrera se deben sustituir por empleados públicos y los políticos tienen que ser técnicos-tecnócratas con mayor control del pueblo y una mejora de la Democracia.

Rumbo a la economía y política que funcione para todos

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